El cambio climático es algo que no es discutible, puesto que al ser la tierra un organismo vivo, necesita estar en cambio permanente para equilibrarse. De lo que se debería hablar es de los «riesgos que comportan esos cambios». Por lo tanto, habrá que hablar de «riesgos climáticos» y no de «cambio climático», que supone una redundancia, ya que el cambio se va a estar produciendo constantemente mientras la tierra exista. De hecho, ha habido períodos donde el cambio climático ha producido más riesgo climático y otras, donde ha producido menos riesgo climático.

Definimos riesgo (también peligro) como:

“cualquier condición, proceso o suceso que puede ocasionar daños a la salud, la seguridad o las propiedades de los habitantes de una región”

Riesgos naturales: los que se producen sìn intervención humana.

Riesgos tecnológicos y sociales o humanos: los que se producen debido a las actividades humanas

Riesgos mixtos e inducidos: los que tienen un origen natural pero la intervención humana los magnifica (mixtos) o los provoca (inducidos). Prácticamente casi todos los riesgos naturales pueden ser intervenidos por el hombre.

Para entender mejor veamos el esquema del final.

La mayoría de los estudios actuales se basan en un exceso de modelizaciones y no de mediciones, ya que la modelización se adquiere gratuitamente por internet, mientras que la medición requiere aparatos muy costosos, y no todas las instituciones pueden asumir ese gasto. Lo métodos basados en modelización son “hipótesis” en cuanto que no garantizan la exactitud, puesto que son simulaciones que dependen de cómo se calibra el modelo, y no reflejan la realidad natural exacta, es decir, se intenta reproducir la situación, sin ser exactamente la misma que la realidad refleja. (VER ESQUEMA MODELOS)

Estos modelos al final se calculan las medias de sus resultados, para obtener un resultado aproximado, estos procedimientos revelan la incertidumbre en los resultados que todavía los modelos obtienen, la mayoría de estudios ambientales a nivel macro, son realizados con estos modelos, pero no se puede pretender, que puedan sustituir la medición directa en las distintas disciplinas del medio ambiente.

El aumento de la politización en este ámbito, que han introducido los politicos, los ecologistas de la mano de los médicos (OMS) han ido colonizando una disciplina de la ciencia medio ambiental que respondía a una lógica de ingeniería y física ambiental, por unas ideas que aun respetables, como son las ecologistas y sociológicas (de tipo marxista o liberal) creando un debate mas en el campo de las ideas (propiciando la confrontación entre ciudadanos virtuosos planetarios y consumidores sospechosos derrochadores), que no en el de los datos, este diagnostico “apocalíptico” actual, se ve reflejado con la aparición de un documento firmado por 500 científicos que tratan de centrar el debate en lo que debería de ser, “los datos”.

Respecto de lo que es la atmósfera y el agua, esta igual de afectada por este falso debate centrado más en las ideas que en los datos, la contaminación es un efecto que hay que evaluar con mucho cuidado para poderlo en tender, un factor muy determinante sobre todo para dar cifras de muertos por contaminación, debería de considerarse que nadie trabaja donde vive, por tanto es difícil conocer que tiempo de exposición tiene en las 24 horas al día, este dato no suele ser considerado en las estadísticas y es un factor determinante, el tiempo de exposición lo que tradicionalmente la “dosis recibida” el desconocimiento de este parámetro puede dar un falsa realidad e introducir resultados y conclusiones erróneas.

Aquí la meteorología es fundamental y los inventarios de emisiones industriales, así como el planeamiento urbanístico de las ciudades, ya que nuestra especial forma de desarrollo tendría que priorizar la “dilución de la contaminación” mas que “bajar la contaminación”, ya que está demostrado que cuando se plantea un planeamiento urbanístico dirigido a la dilución, es mas efectivo y duradero que las medidas de “bajar” puntualmente la contaminación, una medida muy efectiva en Zaragoza fue el cerrar los dos cinturones (2008) que rodean la ciudad, y si algunas vías principales se hubieran soterrado, aun el efecto hubiera sido mayor, esto permite que existiendo la misma contaminación el ciudadano recibe menos dosis diaria.

La astrología clásica entiende que las concentraciones cíclicas de los planetas producen “cambio climático”, y los cero Aries son las que precisan mas sobre los “riesgos climáticos” en este sentido la lógica ondulatoria natural de la astrología da la razón a esta forma de entender las alteraciones climáticas, resolviendo que el cambio climático es onda portadora (concentraciones planetarias grandes ciclos) y el riesgo climático es su onda moduladora (pequeños ciclos, cero Aries, eclipses) asi se puede entender en los textos clásicos como La summa astrológica de Najera, el libro de las Cruces de Alfonso X, Horoscopos históricos Ana Labarta, las Grandes conjunciones de Abumassar etc…

A %d blogueros les gusta esto: